jueves, 10 de enero de 2013

Pitof


     Llevo cerca de dos años con este post, pero eso no debería de parecer algo extraño con la cantidad de borradores empezados que tengo de otros tantos. Pero he elegido continuar este porque, figúrense, podría ser uno de los pocos artículos escrito sobre este sórdido titiritero, Jean Christophe Comar, más conocido por todo el mundo como Pitof. ¿A quién no le llamaría la atención alguien con ese nombre? No es como el caso de Bill Condon (conocido por dirigir vampiros adolescentes recientemente  y no tirarse a Kristen Stewart en un rodaje), al que jodieron desde pequeño por no haber usado el apellido materno. ¡Es que Pitof eligió llamarse Pitof! Por supuesto, al pensar en su decisión nos pueden venir a la mente multitud de casos de actores y directores que se han cambiado el nombre artístico para dedicarse al porno. Todos ellos pensaban que sería algo temporal y  preferían no empañar el verdadero. Sin desviarnos del tema, efectivamente, Pitof trabajó en la industria pornográfica en diferentes puestos. Incluso, llego a debutar como actor en uno de los títulos, ‘Gozar’, allá por el año 78. Él tenía 21 años y, por aquel entonces en Francia, muchas pequeñas productoras se animaron a producir cine para adultos gracias al éxito que tuvo Emmanuelle. Algo que, desgraciadamente, no vino acompañado de calidad del producto. Pitof continuó su carrera en dos decenas de películas más e, incluso, llegando a ser co-guionista del film “Attention Fillettes!...” y “Bourgeoise et… pute!” en 1982. Títulos muy sugerentes, ¿verdad?


'Attention fillettes...!' fue la primera
película de Rocco Siffredi
     Sus primeros pasos como director los dio en 1981, siendo asistente de director en la película X ‘Journal intime d’une jeune fille en chaleur’. Continuó formándose en ‘Les Clientes’, ‘Fantasmes très spéciaux’, ‘Crazy Girls’,… y hasta 7 títulos más. Todo ello entre 1981 y 1983. Hasta entonces había usado abreviaturas de su nombre y algún que otro pseudónimo (como Johan Pitofsky). A  partir de ese momento, este parisino, desaparece del mapa.

     Pitof, que hasta hace bien poco no tenía ni fotos en IMDb, desapareció durante la década de los 80. Según parece, le dio por dedicarse a los efectos especiales, algo de lo que carecían los proyectos a los que se había dedicado hasta el momento. Según ha declarado, estuvo como supervisor del área en proyectos musicales para Prince, Madonna o Boy George. Permítanme que dude parcialmente de ello. Sus trabajos musicales conocidos pertenecen a los 90. Reapareció en 1991 como director de efectos visuales digitales en ‘Delicatessen’, vamos, por la puerta grande. A partir de entonces, fue supervisor de esa área en importantes y conocidos films del cine francés: “Los visitantes” (1993), “La ciudad de los niños perdidos” (1995), “Alien Resurrección” (estadounidense, pero con equipo técnico y artístico visiblemente francés, 1997), “Asterix y Obelix contra César” (1999), “Juana de Arco de Luc Besson” (1999),… En otras palabras, que Dominique Pignon, Marc Caro y Jean-Pierre Jeunet se convirtieron en sus principales valedores. ¿Qué pasó en esa década de los 80 para que tuviese un resurgir tan explosivo?

Con Depardieu repetiría en Vidocq... ¿o deberíamos decir 'Vinocq'?

     En 2001 se estrenó como director con “Vidocq”, mostrando también esas dotes de guionista que ya desarrolló a principios de los 80. En esta ocasión, se encargó de adaptar la conocida autobiografía de François-Eugène Vidocq, un famoso detective parisino del siglo XIX. Con el borracho antipatriota de Depardieu a la cabeza del reparto, contó con Inés Sastre, que venía de su cuya cima actoral el más grande truño de Christopher Lambert (sólo comparable con ‘Beowulf, la leyenda’), ‘Druidas’. La película, que costó 23 millones de euros, se estrenó por todo el mundo, siendo número uno en Francia, pero sin llegar a recuperar la inversión inicial. Pero eso no hizo a Pitof tirar la toalla.

A Inés se le puso la cara torcida al ver como
Pitof volvía a los viejos hábitos de su juventud.

     Su salto a Hollywood tuvo lugar 4 años después, ganando su primer premio en este país, el Razzie Award a la peor película del año, con ‘Catwoman’. Una película pretenciosa, de gran presupuesto (unos 100 millones de dólares) y con un reparto oscarizado que se estrelló en crítica y defraudó en taquilla, no logrando recuperar la inversión. Si alguien no ha visto esta película, si no quiere perder el tiempo, que no lo intente. Hay películas cutres con las que te ríes por ser despropósitos. En esta, en concreto, sólo sirve para echar una buena siesta. Otro intento fallido de DC.

Pitof esperando a que Halle Berry se de la vuelta.

      Esto no detuvo a Pitof, que se enorgullece de afirmar que en 2005 le contrataron para dirigir “Animal”, una insulsa película para vídeo que hubiese significado su continuidad en el mercado estadounidense. Finalmente, no llegó a cuajar el acuerdo y decidió montar su propia compañía de efectos visuales, ‘Pitof Digital Studio’ con sede en Los Ángeles y en Pekín. También colaborando con la empresa ‘Rhythm & Hues”, que recientemente se ha encargado de los efectos digitales de ‘La Vida de Pi’. No obstante, las producciones en las que participó el francés no llegaron a tener tanto renombre, trabajando en proyectos menores desde entonces. En  2008 dirigió ‘Fire & Ice’, una épica TV-movie rumana de bajo presupuesto que pretendía aprovechar el tirón de ‘El Señor de los Anillos’. Otro ‘fail’ para Pitof, que, ni corto ni perezoso, aceptó dirigir ‘Empires of Deep’, aunque finalmente sería dirigida por Michael French (también acostumbrado a hacer mierdas). Aún me sigo preguntando qué le ofrecerían a Olga Kurylenko para participar en tremenda bazofia… mucho dinero. Una cosa es que hagas una película para The Assylum de bajo coste y que va a ser cutre por naturaleza. Otra, muy diferente, es que chinos y yankees se asocien para hacer un largometraje que bien podría haber sido de la productora anteriormente mencionada pero con, ojo al dato, 130 millones de dólares de presupuesto. 130 millones, oiga. 

Reparto de 'Empires of Deep'. Juzguen ustedes mismos.

     La historia es sencilla y muy parecida a la de ‘Manos: Hands of Fate’. Un multimillonario chino, en este caso, que quiere llevar a cabo un guión que ha escrito para hacer realidad su paja mental: una guerra entre criaturas marinas entre las que está la reina de las sirenas, Olga Kurylenko (personaje que iba a ser interpretado inicialmente por Monica Belluci). Para ello contrata a varios guionistas para que pulan su idea, a golpe de talonario, y dedica 3 años para su producción. Un desastre anunciado del que, en esta ocasión, Pitof no será el responsable. 




1 comentario:

juan rodíguez dijo...

Después de ver el trailer solo puedo decir una cosa... tngo ke verla, jajajajajaja.
Me arriesgaré a que sea una mierda.